Semana en Berlín

Realmente no estoy de acuerdo con las analogías expuestas en diversas ocasiones entre las orquestas y los equipos de futbol ya que esto, entre otras cosas, conlleva a una clasificación errónea entre la supuesta “calidad” de las orquestas, como bien aclara paco: “yéndonos a otra realidad tan dispar”. Respecto a lo de la edad de los directores, se tendrían que verificar las estadísticas, sería interesante hacerlo, me pondré en ello. Siguiendo la analogía orquestal futbolística: si la Filarmónica de Berlín fichara a Nott posiblemente tuviera la misma suerte del Barça de Guardiola, sin embargo me parece que a los berlineses le pasa como a otro equipo, muchas estrellas juntas pero no logran el equilibrio, en momentos impresionan y arrasan pero en otros decepcionan, vamos, que la delantera va de fabula pero la defensa (aunque también tenga a los mejores) hace aguas, parecido a lo que le sucede con el desequilibrio provocado por las agresivas cuerdas berlinesas y el resto, siendo las cuerdas un portento, pero me parece que como se mire, en cuanto al sonido global, puede ser una virtud o un defecto. Siguiendo con la analogía, ahora que lo pienso el parecido es real :




Hablando de orquestas, en estos días he reescuchado las versiones (Mahler y Bruckner) de Sinopoli con la Staatskapelle Dresden y todo el Brahms de Sanderling con la misma orquesta, no quiero que se entienda esto como una polémica declaración entre orquestas "rivales", pero es que el equilibrio, la claridad, la prestancia y el colorido de la Staatskapelle es abismante. Otra versión que realmente marcaría lo que yo entiendo como una orquesta realmente excepcional, equilibrada y en gran estado de forma sería la sexta mahleriana dirigida por Boulez, la verdad es que cuando la Filarmónica de Viena se pone manos a la obra es esplendida, pensar en la Novena bruckneriana de Giulini, la cuarta brahmsiana de Kleiber, aquellas grabaciones de Schuricht con DECCA, Kna… Una orquesta que en sus mejores años llegó a ser la versión americana de la Filarmónica de Viena fue la Orquesta de Cleveland, en manos de Szell llegó a tener una calidad fuera de serie.

Por cierto, maravillosa la crónica del periplo en Berlín, me alegra que la hayáis pasado tan bien, se ve que incluso Martín se la pasó genial.